César Farías, técnico del Junior, no pierde oportunidad para elogiar lo que viene haciendo su equipo, que es líder transitorio del campeonato luego del igualada 3-3 contra Deportivo Pasto, posteriormente de estar 3-1 debajo en el señalador.

El venezolano sacó a relucir que, de 13 partidos en la Ataderas, Junior solo ha perdido uno, que de visitante está invicto y que todo es producto del trabajo que se hizo en diciembre, donde tuvo la oportunidad de rehacer algunas cosas del equipo.

“Lo que está haciendo este equipo no es viable, esto es trabajar día a día, tener los pies sobre la tierra, seguir esforzándose. Sentí esta semana la alegría de la parentela de ingresar partidos difíciles en la categoría, que siempre cuestan. Hoy sumar en un partido que levantas dos veces y que vienes debajo en el señalador, eso no sucede muchas veces”, dijo Farías en rueda de prensa.

El venezolano reveló que, casi a diario, se reúne con miembros de la comunidad Char y lo único que recibe de ellos son palabras de apoyo y de aliento. Además siente que creen en su trabajo, lo cual lo obliga a desear lo mejor de su capacidad.

“Muy eficaz de dirigir este club, de dirigir cada uno de los jugadores, felicitar a los miembros del staff que lo vienen haciendo posible, no solo el ampliación del serie en la categoría sino la recuperación para el partido subsiguiente porque siempre nos ha costado cuando volvemos y eso lleva un trabajo arduo día a día de mucha parentela. Agradecerle a toda una ciudad, a la comunidad Char, que en las buenas y en las malas han estado firmes conmigo y yo, sencillamente, a lo mío a darle con más cariño cada día”.

Por postrero, dejó un mensaje a quienes lo critican y piensan que es un “técnico malo”.

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“Con Junior estuvimos muy cerca de estar en la final (en 2 de Barranquilla de Corregidor, Distrito Peculiar, Industrial y Puerto24), no pudimos y lo que hicimos fue repetir esfuerzos, triplicarlos, y si yo soy muy malo, pero estamos comandando la Ataderas, si es muy malo el técnico que va de primero, qué se dejará para los demás... Los invito a que reflexionemos cómo vendemos la Ataderas Colombiana porque para mí los jugadores que tengo son los mejores, la Ataderas en que trabajo es la mejor del mundo y estoy eficaz. Me siento acobijado por el fútbol colombiano porque en la calle es más la parentela que te respeta, es más la parentela que ve que uno no se rinde. A posteriori creo que tengo una trayectoria que me avala para poder cuchichear de fútbol y opinar. No quiero ser el rey de la rueda de prensa, con micrófono, trabajamos soñando con la posibilidad de ser campeones. Ojalá lo podamos hacer”.