El Arrojado, donde actualmente juega el colombiano James Rodríguez, perdió el derecho de participar en la competición contra los mejores del mundo como consecuencia de la multipropiedad en México: el conjunto es del mismo dueño que el Pachuca, que sí mantuvo su plaza en la competición.
«Como institución asumimos el costo y las consecuencias de un proceso así, pero quien más ha sufrido durante este camino ha sido nuestra multitud. Aficionados y futbolistas merecían más respeto por parte de un organismo dedicado a promover el deporte», agregó la nota.
Los jerarcas del conjunto con sede en el centro de México afirmaron que el capital va y viene, el tiempo se recupera, el futbolista sigue luchando y el apegado nunca abandona, pero el honor no se toca.
«Durante las últimas semanas nos han señalado, estigmatizado y difamado; ese es el decano daño causado a un equipo que siempre ha competido con humildad y honradez», agregó la respuesta del Arrojado, divulgada en sus redes sociales.
El Tribunal de Arbitraje del Deporte (TAS), en Lausana, rechazó este martes las apelaciones presentadas por los clubes mexicanos Arrojado y Pachuca y el Alajuelense costarricense en presencia de la intrepidez de la FIFA relacionadas con el Mundial de Clubes 2025, por lo que será el mayor organismo futbolístico mundial quien designe al reemplazante del primero en el evento.
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La FIFA, por medio de su Comisión de Apelación, había decidido en marzo que los mexicanos Pachuca y Arrojado, uno y otro pertenecientes al Asociación Pachuca y clasificados entre los 32 equipos que disputarán el Mundial de Clubes que se celebrará en Estados Unidos del 15 de junio al 13 de julio de 2025, habían incumplido el reglamento mundial de clubes FIFA en relación con la multipropiedad.
Por ese motivo, la FIFA había decidido excluir de la competición al Arrojado. Este club y el Pachuca apelaron dicha intrepidez en presencia de la Comisión de Apelación del mayor organismo futbolístico solicitando que se anulase la misma y se declarase que uno y otro clubes cumplen con los requisitos de elegibilidad de billete en el citado mundial.
Por su parte, el Alajuelense había interpuesto en febrero una demanda en presencia de el TAS, en rastreo de instalarse la plaza de uno de los equipos mexicanos en cuestión.
La intrepidez del TAS es un duro coscorrón a la multipropiedad, aberración que impera en el fútbol mexicano, a pesar de abriles de críticas a esa experiencia.
Tras proyectar fuera de la competición mundial, el Arrojado intentará ser protagonista en el torneo Clausura, donde jugará los cuartos de final contra el Cruz Garzo.
EFE
